Con este tratamiento potenciamos la oxigenación de las células, les damos un soplo de vida y las regeneramos. Al oxigenar las células conseguimos que la piel se vuelva más joven. El ozono estimula el colágeno, la elastina, es antioxidante y restablece la circulación sanguínea, tiene efecto desinfectante, neutraliza las bacterias de la piel. Gracias a este tratamiento facial cerramos los poros de la piel, mejoramos las manchas y conseguimos unos resultados excelentes.
Otras aplicaciones de la ozonoterapia son: oxigenante facial, tratamientos de acné, tratamientos antimanchas, tratamientos de rejuvenecimiento, lifting facial, tratamientos de reafirmación de la cara, cuello y escote, aclaración de ojeras y reducción de bolsas, postmicropigmentación, postaplicación en medicina estética, estrías y cicatrices.