La lechuga es una de las verduras que más versatilidad presenta a la hora de preparar un plato, haciendo posible que se pueda comer casi a diario. Esta verdura aporta numerosas vitaminas y también minerales pero en menor proporción. Esto hace que sea uno de los ingredientes estrella en las dietas ya que apenas aporta calorías, tan solo contiene 18 calorías por 100 g, debido a que contiene un 94% de agua.
Sin duda, la lechuga se convierte en un alimento refrescante y remineralizante que ayuda a conciliar el sueño y analgésicas frente al dolor. En la Clínica Figursan, no queremos que pierdas la oportunidad de disfrutar de esta deliciosa verdura y te proponemos un plato muy sano, gracias a que se combina con otras verduras y hortalizas como la zanahoria, tomate o apio
Ingredientes:
- 4 – 6 hojas externas de una lechuga
- 1 zanahoria grande o 2 pequeñas
- 1 tomate pequeño
- 1 rama pequeña de apio
- 1 litro de agua
- Sal, 1 cucharilla de café
- 1 rama de perejil
- 1 cucharilla de postre cúrcuma
- Pimienta negra, la punta de una cucharilla de café
- Aceite de oliva virgen, 2 cucharadas soperas
Elaboración:
Para elaborar este plato tan saludable lo primero que hay que hacer es lavar en profundidad la posible suciedad o tierra que pueda contener la lechuga, las zanahorias, el tomate o el apio. Cuando estos ya estén limpios, se podrán poner a cocer en una olla con agua durante unos 20 minutos.
Tras este tiempo, se debe apagar el fuego, añadimos las dos churadas de aceite de oliva, el perejil, la cúrcuma y la pimienta negra. Mezclamos todo y, posteriormente, con la ayuda de una batidora, mezclamos hasta conseguir una mezcla homógenea y cremosa sin ningún grumo.
Lo más cómodo de este plato es que se puede comer tanto frío como caliente, convirtiéndose en una receta apta tanto para el verano como para el invierno.
Si quieres saber más recetas donde la lechuga sea también la protagonista, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. En la Clínica Figursan te asesoraremos de manera personalizada.